¿TE ACUERDAS, CASSANDRA SOTO? ÉRAMOS ALGO ASÍ COMO SOMBRAS EN LOS GHETTOS VERTICALES

La reflexión que nos propone Los Ghettos verticales es cruda y al hueso ¿somos capaces de ver más que sombras? Cuando la realidad es adversa, difícil, dolorosa, no queda más que disociarse. No es una elección, es la única forma de sobrevivir. Es una defensa del propio cuerpo.